Trabajo remoto: los pros y los contras

Trabajo remoto: los pros y los contras

El teletrabajo es uno de los nuevos fenómenos de nuestra cultura. Pero una mayor autonomía del trabajador también puede tener una implicación invasiva y arruinar su mundo social. Al mismo tiempo, podría empobrecer intelectualmente su obra.

Trabajo remoto: los pros y los contras

Última actualización: 24 de marzo de 2020

El mundo del trabajo ha cambiado considerablemente en los últimos años. Una de las transformaciones más importantes es la irrupción y masificación del trabajo remoto. Hoy en día es una modalidad que está presente prácticamente en todo el mundo. Y parece que será el modo dominante en el futuro.



Trabajar a distancia ofrece enormes beneficios: ahorra un tiempo precioso en los desplazamientos de un punto a otro, además de reducir el tráfico rodado y, por tanto, la contaminación del aire. En principio, permite una mayor flexibilidad en la organización del tiempo y otorga un mayor grado de autonomía al trabajador.

Sin embargo, trabajar de forma remota también presenta varios problemas. Entre los muchos, trabajar en soledad. No hay ningún colega a tu lado para discutir algo o bromear durante el descanso. Los otros comienzan a ser una presencia abstracta y meramente funcional.

Este aspecto plantea interrogantes sobre el futuro de las empresas. ¿No habrá más contextos colaborativos? ¿Qué consecuencias tendrá la falta de contacto con los compañeros, ese que muchas veces ayuda a resolver problemas ya tener nuevas ideas?

Si quieres ir rápido, ve solo; si quieres llegar lejos vamos juntos

-proverbio africano-

Los pros del trabajo remoto

El teletrabajo ofrece beneficios muy importantes. El primero de ellos, ya mencionado, es la posibilidad de ahorrar un tiempo precioso, normalmente desperdiciado en los desplazamientos. Esto también conduce a ahorros en términos de dinero y energía emocional., ya que ya no será necesario enfrentarse al ajetreo de las grandes ciudades. Es por tanto más barato para el trabajador, la empresa y la sociedad.



Por otro lado, con el trabajo remoto (también llamado teletrabajo) los límites geográficos colapsan. Una persona puede trabajar desde cualquier parte del mundo, para cualquier empresa del mundo. La empresa es la ganadora, porque esto le permite acceder a perfiles aún más cualificados. Y el trabajador puede acceder a un mercado laboral mucho más grande.

El teletrabajo, en particular, ofrece un alto grado de autonomía al trabajador. Tendrá más oportunidades para negociar los horarios y evitar otras fuentes de presión a menudo presentes en el trabajo presencial. Por ejemplo, tendrá que invertir menos en ropa de oficina. Al mismo tiempo, podrá diseñar su propio entorno de trabajo y de la forma que le resulte más cómoda. Finalmente, el trabajo remoto hace que el trabajador sea más independiente.

Los contras del teletrabajo

Si bien el trabajo remoto garantiza una mayor autonomía, también requiere una fuerte autodisciplina. No existe una figura encargada de controlar rígidamente el trabajo realizado y esto podría llevar a algunas personas a la desorganización. Hay quienes no pueden repetir la rutina empresarial cuando están en casa. Y he aquí que el desorden y la inestabilidad serán los aspectos preponderantes.

Como no sales de casa todos los días, en algunos casos, los problemas domésticos acaban interfiriendo en el trabajo. No existe una línea divisoria con el entorno familiar y si el entorno no es saludable, podría tener consecuencias negativas en el rendimiento. También es posible que haya más interrupciones y distracciones en el hogar que en el lugar de trabajo. Esto podría repercutir en una mayor pérdida de tiempo, destinado a otras actividades.


Por otro lado, falta un grupo de compañeros que estén físicamente presentes y en quienes apoyarse. Esto podría empobrecer la vida social y provocar un sentimiento de soledad.

Al mismo tiempo, puede perjudicar el trabajo, porque puede resultar en menos estímulos cognitivos y emocionales. Importantemente, el trabajo podría verse afectado, así como la predisposición al trabajo en equipo.



Un modelo en desarrollo

El trabajo remoto es un modo relativamente nuevo (principalmente asociado a la informática, aunque echando la vista atrás en la historia encontraremos otros casos anteriores, como en el caso de las costureras).

Nos encontramos en una fase en la que los métodos y procesos relacionados con esta forma de trabajar se encuentran aún en fase de definición y perfeccionamiento, hasta obtener los máximos beneficios. En el mundo de la informática, en realidad, todavía no existe un especial interés por resolver los problemas relacionados con esta forma de trabajar.

La distancia no debe ser un límite a las experiencias de colaboración e integración, que son los cimientos de la innovación. Hoy predomina la estructura denominada “pulpo”, en la que existe una cabeza de la que se ramifican los tentáculos, de donde se originan y a la que pertenecen todos los componentes. Este aspecto tendrá que cambiar con el tiempo.


En una situación ideal, el trabajo a distancia no debería ser sinónimo de trabajadores solitarios y solitarios obligados a experimentar una invasión de trabajo en su vida privada. Hay muchos aspectos a mejorar, el teletrabajo es un reto para las empresas y para los involucrados en el bienestar organizacional corporativo. Ciertamente esperamos respuestas efectivas a estos desafíos dentro de algunos años.

Añade un comentario de Trabajo remoto: los pros y los contras
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.