¿Quién nos enseñó a manejar las emociones? ¿Alguien se ha hecho alguna vez un examen de resiliencia? ¿Cómo tomamos decisiones en las situaciones más difíciles? En este artículo damos las respuestas a estas y otras preguntas interesantes.
Última actualización: 15 de junio de 2021
Tú también habrás vivido emociones que no supiste gestionar, intensas ya veces dolorosas. Es posible que haya experimentado situaciones desconcertantes de las que solo quería escapar. En estos momentos, la única manera recuperar el control ante las tentaciones e impulsos, es un manejo inteligente de las emociones.
La gestión emocional es, muchas veces, la clave del éxito hacia los triunfos, ya que nos ayuda a tomar decisiones acertadas. Ser consciente de tus emociones y aprender a manejarlas es una gran ventaja de adaptación en la sociedad actual.
“Vivimos en una sociedad que no nos educa para ser personas emocionalmente inteligentes”.
-Daniel Goleman-
Aprendiendo a vivir con nuestras emociones
Comprender el universo emocional que reside en nosotros es un viaje que nunca termina. En la vida nos enfrentamos a multitud de experiencias diferentes a las que reaccionamos en consecuencia. Conocernos y saber qué estamos sintiendo en un momento dado puede ayudarnos a encontrar la respuesta más adecuada.
Manejar los estados emocionales negativos no es tarea fácil; para dificultar el manejo, también pueden presentarse síntomas físicos como dolor de cabeza, sudor, golpe de calor, dolor gastrointestinal. En estas circunstancias destacan los pensamientos que nos atormentan, los asociados a sentimientos como la culpa, el miedo o la frustración.
“Como seres humanos todos queremos ser felices y libres de cualquier desgracia, hemos aprendido que la clave de la felicidad es la paz interior. Esto se ve más obstaculizado por emociones perturbadoras como el odio, el apego, el miedo y la desconfianza. El amor y la compasión, en cambio, son fuente de paz y felicidad”.
-Dalai Lama-
Manejar las emociones para ser resilientes
Gestionar nuestras emociones es fundamental para nuestro desarrollo y afecta directamente nuestra autoestima y la forma en que nos relacionamos con el mundo y con los demás. Actualmente se implementan programas de manejo de emociones en los centros educativos, con la intención de enseñar desde edades tempranas a tomar conciencia del mundo interior de sus emociones, para adquirir modelos de comportamiento y relacionales efectivos.
Cada vez se dedican más esfuerzos a encontrar los mejores métodos para gestionar las emociones diarias. Es el caso de los programas de formación destinados a potenciar la conciencia y la comprensión e identificación de nuestras emociones de forma adecuada. Solo así podremos tratarlos de forma selectiva y no automática.
En esta línea se posicionan programas enfocados a la enseñanza del mindfulness, como el MBSR (Mindfulness-based stress reduction) de Jon Kabat Zinn y el MBMB (Mindfulness-Based Mental Balance) de Santiago Segovia, diseñados para adquirir una conciencia plena y poder a autogestionarse. Normalmente se basan en estrategias para aumentar las habilidades de gestión de los problemas cotidianos, prestando especial atención al tema de la resiliencia.
Hábitos para fortalecer la resiliencia
Algunas estrategias útiles en el manejo de las emociones son:
- Toma conciencia de quién eres, qué quieres, hacia dónde te diriges. Esto te ayudará a conocer tus fortalezas y debilidades. No subestimes estos últimos, que son fundamentales para encontrar el equilibrio.
- Aprende de las experiencias. Cada vez que tropieces en el camino, analiza el motivo del fracaso.
- Dedícate a lo que te apasiona. Descubre cuál es tu propósito para encontrar la energía necesaria para lograrlo. Moverse en la dirección de nuestros sueños nos ayuda a nunca detenernos.
- Trabajar la resiliencia. La resiliencia se aprende afrontando las diferentes circunstancias de la vida. Consiste en una serie de habilidades que se pueden aprender, y que nos ayudarán a recuperarnos cada vez más rápido en caso de caídas.
Inteligencia emocional, el secreto para gestionar las emociones
La inteligencia emocional influye en nuestro futuro personal y en nuestros éxitos, marcando puntos de apoyo tan importantes como las relaciones sociales. La inteligencia emocional es una habilidad de las personas que tienen una buena autogestión.
Quienes presumen de una buena inteligencia emocional son capaces de adaptarse mejor al ecosistema en el que viven, estando más preparados para afrontar cambios y retos inesperados. Se trata de adquirir un mayor autocontrol, pero también, por ejemplo, una mejor gestión del miedo que puede derivar de la incertidumbre.
