Autolesión psicológica y autoestima

Autolesión psicológica y autoestima

¿Cuál es el papel de la autolesión psicológica en nuestra vida? ¿Qué relación tiene con la autoestima? ¿Qué perdemos cuando nos hacemos daño? Descúbrelo en este artículo.

Autolesión psicológica y autoestima

Última actualización: 05 de febrero de 2021

La autolesión psicológica es la otra cara de la autoestima y es más común de lo que pensamos. La mayoría de nosotros hacemos juicios sobre nosotros mismos, lo que merece y lo que vale. Procesamos estos pensamientos dentro de nosotros mismos, manteniéndolos en secreto la mayor parte del tiempo y menospreciando los logros. Al mismo tiempo, tendemos a exagerar nuestros errores.



Al hacerlo, elevamos nuestros estándares de auto-necesidad, dejándonos abrumado por la sensación de que alguien podría haberlo hecho mejor nuestro. Así socavamos nuestra autoestima. Averigüemos más sobre el vínculo entre la autolesión psicológica y la autoestima.

¿Cómo se desarrolla la autolesión psicológica?

En términos generales, La autoestima es nuestra capacidad de valorarnos a nosotros mismos. También implica la voluntad de desafiar los pensamientos negativos que otros puedan tener sobre nosotros.

La baja autoestima nos hace más vulnerables a las críticas de los demás, aumentando la probabilidad de considerarlos realidades absolutas. Es en este punto cuando puede surgir ese "dictador interior"., autolesiones psicológicas: disminuimos nuestros esfuerzos, aumentamos la percepción de errores, nos avergonzamos de nosotros mismos.

Autolesiones psicológicas y autoestima: donde nace el "dictador interior"

Desde el momento en que nacemos estamos expuestos al juicio y opinión de los demás. Una falta de motivación recibida desde una edad temprana puede mermar nuestra capacidad para defendernos de las críticas.

Si desde nuestras primeras experiencias nos hemos visto castigados por nuestros fracasos, menospreciados en la consecución de nuestros objetivos, es normal crecer sin poder encontrar el propio valor.


De hecho, se desarrolla la idea de que evitar la quiebra es fundamental, al menos para evitar toparse con juicios y críticas. Si el impulso de no fallar se vuelve más importante que la motivación para alcanzar los objetivos, es posible que, si no podemos tomar las críticas desde un punto de vista constructivo, perdamos todo el valor que pueden aportar.


En esta dinámica, las críticas de los demás se interiorizan, comprometiendo nuestra integridad. Se convierten en autocríticas, mucho más peligrosas porque salen de nuestro interior. Como vemos, la autoestima va de la mano con la autolesión psicológica: creemos que nuestra existencia se basa en nuestras metas, pero somos incapaces de valorarlas.

¿Cómo reconocer las autolesiones psicológicas?

Normalizar las autolesiones psicológicas es muy peligroso. No solo daña la autoestima, sino que puede conducir a etapas más peligrosas como trastornos del estado de ánimo o trastornos depresivos.

La tendencia a autolesionarse no surge de repente. Es una agresión hacia uno mismo que va macerando con los años, a veces hasta el punto de dificultar la distinción entre las críticas que hacen los demás y las que se dirigen hacia nosotros mismos.

Cuando la autolesión se instaura en nuestra vida, las opiniones constructivas de los demás, aquellas encaminadas a mejorarnos, también son acogidas negativamente. Veamos algunos ejemplos:

  • Estás en el trabajo y te han sugerido que intentes hacer una tarea diferente. Convenciéndote a ti mismo de que la forma en que lo hiciste fue totalmente incorrecta.
  • Comete un error y sigue dándole vueltas, aunque te hayan perdonado y reconocido tus esfuerzos.
  • Sientes que no eres digno de tu trabajo, que otros podrían hacerlo mejor y que tu jefe tarde o temprano se dará cuenta.

Haz una pausa para detener al dictador interior.

La voz del dictador interior puede ser lo suficientemente fuerte como para paralizar nuestras acciones basadas en valores. Si interrumpimos actividades que consideramos importantes, caeremos en la trampa de nuestra experiencia (los juicios ajenos recibidos en la primera fase de nuestra vida, además de los actuales). En otras palabras, basaremos nuestra existencia en intentar no fracasar.



Evitar el fracaso a toda costa significa no estar dispuesto a experimentar la más mínima incomodidad en el camino hacia los valores. Y esto no nos librará de la voz interior que sigue sugiriendo que si nos encontramos en esta situación, la culpa es nuestra y sólo nuestra incapacidad.

¿Cuál es el papel de la autoestima?

¿Alguna vez te has detenido a observar tu situación con los ojos de otra persona actuando sobre las opiniones de los demás? Te darás cuenta de cómo tu mente, en modo autolesivo, te está alejando de lo que crees que es importante.

Acreditar este diálogo interior y entenderlo como una verdad absoluta solo entorpecerá el logro de tus metas; tu mente te dirá que no eres capaz.

Tratar de erradicar el dictador interior es como desherbar jardín: puedes rasgarlos, pero volverán a crecer. Incluso leer libros sobre autoestima no puede ayudar a eliminar por completo el abuso psicológico. Pueden guiarlo en el camino de mejorar la autoestima, pero los nuevos conocimientos no eliminarán las experiencias de toda una vida.


Sin embargo, existe la posibilidad de mirar la lucha entre la autolesión y la autoestima desde otra perspectiva: practicando la autocompasión. Este último nos permite analizar el enfrentamiento en un nuevo nivel, hay donde se permite equivocarse y dejar que el malestar siga su curso audaz.

Añade un comentario de Autolesión psicológica y autoestima
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.