La escucha consciente, un gesto de generosidad

La escucha consciente, un gesto de generosidad

La escucha consciente, un gesto de generosidad

Última actualización: 27 agosto 2020

Practica elescucha consciente y mostrar que nos preocupamos por los demás es un extraordinario gesto de generosidad.

Cuando una persona nos dice algo, espera que le prestemos atención. Dejemos nuestras preocupaciones a un lado por un momento y unámonos para abordar las de ella. Lo que se nos pide que hagamos es escuchar conscientemente: un acto desinteresado en el que comprometemos nuestros recursos cognitivos.



Partiendo de esta premisa, la escucha consciente representa un verdadero acto de generosidad. ¿Alguna vez has querido decir algo importante para ti y que te interrumpan continuamente con frases como "a mí me pasó en cambio que...", "debiste haberlo dicho o hecho", "me pasó lo mismo cuando...". .." ? ¿O que incluso te interrumpieron haciéndote una pregunta que no tenía nada que ver con el tema del que estabas hablando?

No son para nada momentos agradables, en los que te encuentras frente a un pared de la que solo surge la frustración. La sensación tan familiar, sobre todo en la adolescencia, de que el mundo es un lugar agradable que no encaja con nuestras necesidades. La consecuencia lógica es dejar de intentar comunicar o hacerlo de forma cada vez más desesperada.

Allo stesso modo, a veces nosotros mismos practicamos este comportamiento hacia otras personas, con las mismas desagradables consecuencias. Si quieres mejorar tus relaciones y comunicaciones con los demás, practicar la escucha consciente es fundamental.

¿Qué es la escucha consciente?

La psicóloga española Inmaculada Domínguez ha profundizado en el tema. A continuación nos centraremos en sus estudios para intentar dar respuesta a esta pregunta. Como el nombre sugiere, la escucha consciente es una escucha que realizamos de forma activa y voluntaria. En él entran en juego elementos como la empatía, el amor hacia la otra persona, el respeto y la atención.



La escucha consciente consiste en dejar hablar a la otra persona prestando atención a lo que dice y sin interrumpirla, haciéndole preguntas que muestren interés en el tema para que se sienta realmente escuchada. Representa un acto de generosidad y verdadero interés hacia la otra persona.

Al hacerlo, damos tiempo y espacio tanto a nuestro corazón como a la mente del interlocutor. En un mundo donde la cultura de la inmediatez, la falta de tiempo y el egocentrismo impiden dedicar el tiempo suficiente a los demás y ponen en riesgo nuestras relaciones sociales, esta previsión puede resultar fundamental.

¿Por qué la falta de escucha consciente puede comprometer las relaciones sociales?

Todos necesitamos ser escuchados. Es una necesidad que forma parte integral de nuestra naturaleza como animales sociales.. Si la escucha no es recíproca, la otra persona percibirá una falta de interés por sus sentimientos y su vida. ¿A quién le gusta estar con alguien que no muestra interés?

Lamentablemente, la falta de interés mutuo se ha vuelto muy popular hoy en día, principalmente debido al progreso tecnológico. Las personas tienden cada vez más a aislarse en sus teléfonos inteligentes, incluso cuando están juntas. ¿Por qué permanecer juntos entonces?

La gente está obsesionada con lo que pasa en la red., de lo que piensan, de lo que quieren decir, de sus preocupaciones, de sus responsabilidades. No se detienen ni un momento y no se quedan en silencio para escuchar lo que otros tienen que decir. Y estas actitudes inevitablemente generan conflictos y discusiones.


¿Cómo practicar la escucha consciente?

Si quieres mejorar tu vida, tus relaciones con los demás y contigo mismo, necesitas desarrollar este tipo de escucha. Las diferencias se destacarán.

  • Empieza por meditar; es una excelente manera de detener tu mente y tomar conciencia del aquí y ahora. A través de la respiración y la relajación, te darás cuenta de que eres capaz de detener el torbellino de tu mente y concentrarte en una sola cosa.
  • Escucha con tu cuerpo y no solo con tu mente; adopte la postura de su interlocutor, acérquese a él sin invadir su espacio vital, mueva el tronco ligeramente hacia adelante, para que se sienta escuchado.
  • no interrumpas; si tienes que hacer una pregunta relacionada con el tema, espera a que llegue tu momento.
  • Observar; al prestar atención a sus gestos y expresiones faciales, puede completar la información que se le comunica en palabras.

Practicar la escucha consciente es un acto de generosidad hacia tu interlocutor y hacia ti mismo. Hacia él porque sentirse escuchado será un regalo precioso, hacia ti mismo porque la escucha consciente es una verdadera oportunidad de crecer.


Añade un comentario de La escucha consciente, un gesto de generosidad
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.