En 1972, la Comisión Federal de Comercio de los Estados Unidos aprobó una ley que exige que cualquier venta puerta a puerta vaya acompañada de una declaración escrita que informe al comprador del derecho a retirarse de la compra dentro de los tres dÃas posteriores a la venta. Esa ley se aprobó debido a las quejas de los consumidores sobre técnicas de venta agresivas y contratos en minúsculas.
Los economistas llaman a esto el "perÃodo de enfriamiento" y tendrÃa sentido aplicarlo tanto a las decisiones fundamentales que pueden cambiar nuestras vidas, como a aquellas cuyo impacto podrÃa volverse insospechado porque no podemos controlar todas las variables.
¿Qué es exactamente el perÃodo de enfriamiento?
El perÃodo de enfriamiento es como tomarse un momento de tranquilidad para pensar antes de tomar una decisión. Es esa pausa que hacemos antes de decir lo primero que nos viene a la mente, el tiempo que nos tomamos para pensar antes de elegir.
El perÃodo de enfriamiento también se trata de no tomar una decisión antes de dormir. ¿SabÃas que el 75-95% de los sueños tienen contextos emocionales?
Los neurocientÃficos han visto que a medida que el cerebro atraviesa las diferentes etapas del sueño, experimenta cambios drásticos en su neuroquÃmica y funcionamiento. Las áreas relacionadas con las emociones, como la amÃgdala, el hipocampo y la corteza cingulada anterior, se vuelven particularmente activas.
Durante el sueño, los recuerdos emocionales se consolidan, pero las respuestas de miedo también se extinguen. Esto significa que una buena noche de sueño puede disminuir el impacto emocional de las situaciones al ayudarnos a ver las cosas con mayor claridad. Por lo tanto, dejar pasar al menos una noche antes de tomar una decisión importante también actúa como un perÃodo de enfriamiento.
Las 2 situaciones en las que necesitamos aplicar ese tiempo de reflexión
Si bien siempre debemos pensar antes de actuar, aplicar el perÃodo de enfriamiento es particularmente importante en dos casos, según los economistas CR Sunstein y RH Thaler:
1. Decisiones importantes poco frecuentes. Cuando se trata de decisiones que no solemos tomar, como elegir la ciudad a la que mudarnos, el próximo automóvil que comprar o la universidad, debemos detenernos y pensar. En este tipo de decisiones no tenemos mucha experiencia y hay muchos factores en juego, por lo que es fundamental aplicar un perÃodo de enfriamiento que nos permita vislumbrar todas las opciones y sopesar las consecuencias.
2. Situaciones muy emocionales. Cuando nos encontramos en situaciones complejas que desencadenan una intensa respuesta emocional, como un diagnóstico erróneo o una crisis de relación, nos resulta difÃcil pensar de forma racional y es más probable que tomemos decisiones apresuradas de las que luego nos arrepentimos. En estos casos, el perÃodo de enfriamiento nos permitirá recuperar la calma y recuperar el control emocional para tomar la mejor decisión posible.
¿Cuánto tiempo debe durar este perÃodo de enfriamiento?
El perÃodo de enfriamiento puede durar unos minutos o unos dÃas. Cada persona y cada situación es diferente, por lo que idealmente esta fase de reflexión deberÃa durar tanto como sea necesario.
Si es una decisión vital, puede posponer la pausa durante dÃas o incluso semanas. Esto le dará tiempo para recopilar toda la información que necesita hasta que se sienta seguro para tomar una decisión. Si está atravesando una situación de conflicto que provocó sus emociones, el perÃodo de enfriamiento debe durar todo el tiempo que sea necesario para recuperar el control de sus emociones.
Cabe aclarar que este perÃodo de reflexión no puede convertirse en una excusa para postergar o evadir la toma de decisiones. No es un momento para olvidar un problema o un conflicto, sino para reflexionar sobre sus causas, alternativas y consecuencias.
Tomarse el tiempo para reflexionar, calmar las emociones y tomar la distancia psicológica necesaria nos ayudará a evaluar mejor nuestras alternativas y anticiparnos a las consecuencias de nuestras decisiones. Esto no significa que no nos vayamos a equivocar, pero al menos tomaremos nuestras decisiones con conocimiento de los hechos y siendo más conscientes de todos los factores involucrados.
El perÃodo de enfriamiento no es una garantÃa de éxito en la toma de decisiones, sino más bien una especie de protección contra la impulsividad y la irracionalidad. Simplemente evita que la semilla del arrepentimiento crezca en el futuro.