Desarrollando la Paciencia: 5 Hábitos Simples

Desarrollando la Paciencia: 5 Hábitos Simples

Desarrollando la Paciencia: 5 Hábitos Simples

Última actualización: 14 septiembre, 2019

Desarrollar la paciencia es muy importante para vivir de manera más inteligente. Sin embargo, también sabemos que entre el decir y el hacer está el mar. Sobre todo si pensamos que el mundo actual no es precisamente pacífico.

Desarrollar la paciencia es clave porque, en realidad, las cosas más importantes de la vida toman tiempo. En cualquier proceso importante, los tiempos de acción deben combinarse con los tiempos de espera. Tiempos de éxito y tiempos de trabajo.



"La paciencia es un árbol que tiene raíces amargas y frutos muy dulces".

-proverbio persa-

Desarrollar la paciencia no es fácil, pero tampoco imposible. Lo cierto es que los hábitos también juegan un papel en este proceso. Nos acostumbramos a pensar rápido y no dar lugar a esperas y descansos necesarios. Es por esto que se vuelve importante adquirir nuevos hábitos que nos ayuden a ser más pacientes. Aquí hay 5.

Hábitos con los que desarrollar la paciencia

1. No juzgues

¿Qué tiene que ver el hábito de juzgar a los demás con el propósito de desarrollar la paciencia? A decir verdad, mucho. A veces gastamos demasiada energía criticando a los demás. Pensamos en el mal que hacen y en lo que podrían o deberían ser. Este ejercicio introduce una fuerte tensión entre el no y el mundo.

En sí mismo, juzgar a los demás significa adoptar una postura hostil frente a la realidad. Esta hostilidad a menudo se traduce en intolerancia. A su vez, la intolerancia desencadena la impaciencia. Por el contrario, si aprendemos a aceptar a los demás tal y como son, nos resultará más fácil mantener nuestro equilibrio interior. Como resultado, será más probable que desarrollemos paciencia.



2. Distanciarse en los conflictos

Si pensamos por un momento, nos daremos cuenta de que la mayoría de los conflictos son inútiles. Surgen del malestar que cada uno lleva dentro de sí. Por lo general, no conducen a ninguna parte. Son una expresión de no querer adaptarse. En la mayoría de los casos, solo causan más molestias.

El conflicto en sí no es malo, al contrario muchas veces es enriquecedor porque nos permite ver las cosas desde otro punto de vista. Nos ayuda a evitar los errores que estamos a punto de cometer. Sin embargo, debemos saber gestionar los conflictos: no debemos permitir que se prolonguen en el tiempo y provoquen que sigamos tensos.

3. Reconocer la contribución de los demás

Para desarrollar la paciencia, es fundamental aprender a valorar la contribución de los demás. Hay tanta gente que hace mucho por nosotros. Ninguno de ellos es perfecto, como nosotros, pero al final enriquecen nuestra vida y la hacen mejor.

Cuando ignoramos la contribución de los demás, terminamos dando la importancia equivocada a sus errores más pequeños. Desarrollar la paciencia es posible aceptando y valorando. Si reconocemos la contribución de los demás, nos encontraremos en una dimensión más generosa y pacífica, con ellos y con nosotros mismos.

4. Reduzca la velocidad

Uno de los grandes problemas de nuestro tiempo es la obsesión por la velocidad. Nos hemos convertido en enemigos de la lentitud. Perdemos de vista el hecho de que las cosas más importantes de la vida toman tiempo. A veces, la diferencia entre una buena y una mala decisión es solo un momento de espera.


Somos los constructores de nosotros mismos y de nuestra propia vida. Si lo queremos todo demasiado rápido, no podemos construir una estructura sólida. Al contrario, pesamos poco y obtenemos resultados frágiles. En cambio, tratemos de reducir la velocidad cada vez que nos sintamos apurados.


5. Respira

La respiración es una herramienta útil para una mente y emociones sanas. El oxígeno es uno de los alimentos más importantes para nuestro cerebro. Por eso, todo lo relacionado con la respiración concierne también al buen funcionamiento de nuestro mundo interior.


Tomarse un momento para respirar, quizás tres veces al día, es un hábito muy saludable que nos ayudará a desarrollar la paciencia. Debemos cerrar los ojos y no pensar en nada. Sólo al aire que entra y sale, en la vida que allí vive.

Para desarrollar paciencia, necesitas tener paciencia., de hecho no es una meta que se pueda alcanzar de la noche a la mañana. Toma tiempo y esfuerzo. Sin embargo, es uno de esos resultados que nos cambian para siempre y enriquecen enormemente la vida. Pruébalo también.

Añade un comentario de Desarrollando la Paciencia: 5 Hábitos Simples
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.